Hasta hace un año, yo era profesora. Ahora está casada con su esposo, que es su colega, y tiene una familia. En ese momento, recibí la noticia de que mi esposo había sido herido y tenía que ser hospitalizado. Cuando escuché a los estudiantes quejándose y reunidos en el callejón de atrás, corrí hacia allí y supe que alguien que llevaba mi uniforme había chocado con una motocicleta. Decidí regresar al trabajo para que mi esposo pudiera tomarse un tiempo de descanso.
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