Debido a que la empresa recortó personal, actualmente estoy desempleado, gracias al seguro de desempleo, puedo aguantar un tiempo más. De repente, una hermosa chica se mudó a la habitación del lado opuesto. Desde mi habitación podía ver todo el lado a través de la ventana. Parece que ella misma no sabía que la estaban espiando, descuidadamente teniendo sexo con otra persona en la ventana para que yo pudiera admirar su cuerpo perfecto y entero. Después de un rato de mirar, descubrí que parecía que el hombre no era el esposo de la hermosa chica, siempre llegaba a las 15 en punto y el día que llegaba iba disminuyendo. Hoy era el día en que todavía venía a follársela. Pero después de esperar a que no apareciera nadie, de repente me encontró y me llamó. Se llamaba Suzume Mino y sabía que la estaba espiando. Pensando que Mino se enfadaría, me arrodillé y le pedí perdón. Pero contrariamente a mis pensamientos, ella no estaba enojada en absoluto, pero también me quería... ¡Practiquemos la postura de conducción con ella! El caso era que Mino-san era la amante del otro hombre, y siempre criticaba sus escasas habilidades sexuales, especialmente cuando montaba a caballo. Mino-san pensó que, por esa razón, poco a poco se cansó de ella y venía aquí cada vez menos. Quiere mejorar su sexualidad y ayudar a los hombres a sentirse aún más felices. Y a partir de entonces, me convertí en una herramienta para que ella practicara. Solo me permitían quedarme quieto y ella cabalgaba sobre mí. Pero con el tiempo, parecía aceptarme más, ya no lo hacía todo sola, sino que me daba la iniciativa, disfrutaban juntas del placer sexual...
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