Demasiado deprimida con un esposo impotente que no puede satisfacer sus inagotables necesidades sexuales, Onodera decide engañarlo con un joven saludable, muy acorde con sus gustos. La película retrata su aventura con el amante en un hotel cerca de casa, donde ambos se entienden muy bien y comparten un detalle muy especial: son extremadamente libidinosos. La pareja infiel disfruta de momentos de placer juntos sin saber que esos instantes son, en realidad, los momentos de profunda decepción y dolor para el desafortunado esposo.
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