Recientemente se graduó de la universidad, después de muchas dificultades para encontrar trabajo, finalmente la hermosa Motozawa consiguió un puesto en una empresa y el primer día que fue a trabajar fue, sin duda, un día que no podrá olvidar en su período de prácticas. Con un atuendo provocativo combinado con su atractiva figura, no es de extrañar que el director lascivo no pudiera apartar la mirada cuando ella entró en la oficina a recibir su trabajo. En ese momento, debido a su innata naturaleza perversa, no pudo contenerse y mostró su verdadera identidad como un director disfrazado de un degenerado al obligarla inmediatamente a tener relaciones con él. Demasiado ingenua y joven, ella fue fácilmente sometida ante las halagadoras palabras y la conducta rígida de este miserable director.