Saber amar fielmente... Un impulso imparable, un deseo incontrolable. "Señorita, ya no puedo mentir sobre mis sentimientos..." La maestra lasciva engaña a los estudiantes con palabras jugosas y un cuerpo regordete. Chupar el pene lujurioso de un estudiante verde. Polla erecta sin fin "Señorita, no... esto..." ¡El pistón de un colegial joven y fuerte! Inmerso en SEXO inmoral con todo su corazón, ha estado expuesto a los vómitos de los estudiantes muchas veces. Los placeres que están prohibidos cuando el sacerdote cae... Soy un buen profesor...
Deja un comentario