Nana, una empleada de oficina que ha trabajado para la empresa durante tres años, tiene un carácter dulce y poco sociable, pero su trabajo es muy lento y su malvado jefe Katsuta la acosa de manera injusta. Nana, que ya no recuerda haber sido tratada amablemente por un hombre en la oficina, se deja llevar por las amables palabras de su jefe, Mayama, quien la trata bien. Esta es la primera vez que recibo un trato tan amable. Cuando le ruego a Nana, cuyas ojos están húmedos como los de un cachorro empapado y adúltero, el cambio repentino es demasiado sorprendente.
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