Mi esposa es una mujer activa, que ama su carrera y prioriza su trabajo por encima de todo, por eso no quiere quedar embarazada, ya que tener un hijo impactaría mucho. Ella no tiene relaciones sexuales conmigo para evitar quedarse embarazada, y respeto la decisión de mi esposa, así que siempre sufro de deseo cada día.
Un día, la hermana de mi esposa, Eimi Fukada, vino a visitar, una hermana joven y hermosa con senos prominentes, y una piel blanca y rosada...
Hablando de esto, ustedes también entenderán lo que va a suceder... :)))
Deja un comentario