Estoy ocupado con el trabajo y perdí la oportunidad de casarme, pero por suerte tengo una esposa hermosa y talentosa, que es demasiado buena para mí. La esposa de él, Rieko, se ha vuelto a casar, pero ella y su hija Taka siguen siendo felices cada día. Un día, como de costumbre, cuando regresé del trabajo, la ropa de cama que acababa de cambiar se ensució. Me sentí extrañamente inquieto, pero no me di cuenta de que este era el comienzo de mi traición...
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