Hoy la empresa hizo una fiesta, estaba un poco demasiado borracho, así que no sabía nada. Rena estaba muy entusiasmada por cuidarme, al ver que ya no estaba despierta y perdía el último tren, así que me invitó a ir a casa y beber más. Mi ropa estaba sucia por mis propios vómitos, y Rena se molestó y me obligó a quitármela. Y ahora conozco sus verdaderas intenciones. ¡Ella es una joven hermosa y talentosa, que siempre es elogiada por su jefe y anhela mi polla! A lo largo de esa noche, Rena me succionó el esperma una y otra vez, ¡y nos follamos desde casa hasta el trabajo!
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