Saki y su esposo viven felices en la casa que le dejaron sus suegros. A pesar de la difícil situación económica, su esposo tiene un trabajo estable con un buen salario y bonificaciones, por lo que no tienen que preocuparse por su alimento. Hoy, mientras hacía las tareas del hogar, un extraño con una máscara irrumpió en su casa y obligó a Saki a abrir la caja fuerte. Si se tratara de un ladrón común, no sabría que Saki tenía una caja fuerte, pero por su voz, Saki pudo reconocerlo: era su cuñado, Kyosuke. Resulta que, debido a deudas acumuladas y malversación de los fondos de la empresa, Kyosuke fue despedido y no tenía dónde quedarse. En su desesperación, tuvo la idea de robar los bienes de su propio hermano. Pero al ver el cuerpo atractivo de Saki, no solo deseaba robar dinero, sino también a esta cuñada seductora. Desde entonces, Kyosuke vive en el trastero del segundo piso. Todos los días, Saki le lleva comida. Siempre que él quiere, Saki debe estar lista para desnudarse y satisfacer sus necesidades sexuales. Sin embargo, el placer de tener sexo con Kyosuke que el esposo de Saki no podía darle. Poco a poco se fue hundiendo en el lodazal de la sensualidad, hasta que un día, cuando su marido volvió de repente a casa antes de lo habitual...
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